Agosto 5, 2014 -- una refleccion por Ruth Marshall
El Gozo: El gozo fue el que sorprendió este pasado Junio en Honduras. En medio de tanta oscuridad y dolor, las sonrisas que salían de las caras de la gente me dejaron sin habla. Uno de los días completos que estuvimos ahí, Michael, Stephen, mi mama, y yo fuimos a visitar a Marvincito a un centro de rehabilitación. Marvincito ocupa un lugar muy especial en mi corazón porque él fue el primer chico de Miqueas que vi en las calles y tuve la oportunidad de apreciar un poco más de su vida. Había tenido la oportunidad de visitarle durante su tiempo de rehabilitación, pero no desde que regreso a las calles por más, y por eso estaba muy ansiosa por ver como estaba. Pero me di cuenta que él había perdido algunos familiares y su corazón estaba quebrantado. Todo lo que pude hacer al escuchar esta noticia fue sentirme atónita de que tan fuerte era y pensar en que yo nunca podría soportar lo que el tuvo que pasar. Aun cuando el haya pasado por tanto dolor emocional, tuvo un acercamiento con Dios y encontró fe y coraje para poder dejar su adicción a las drogas. Para nosotros podría ser algo muy fácil, pero cuando las cosas no van del todo bien y tú solamente quieres salir corriendo, las drogas parecen ser la única solución a los problemas. Dios le mostro a Marvin las ventajas de las cosas a largo plazo en vez de vivir cada día pensando en otra realidad.
Después de escuchar el progreso que había tenido Marvin, el hombre supervisor del proyecto de rehabilitación sugirió que podría pasar el resto del día con nosotros. Ole! Después de ponerse otra ropa, se subió al carro pick up de Michael y la sonrisa que Marvin tenía en su rostro, al solo saber que estábamos ahí para ayudarle y que no nos habíamos olvidado del él, era tan hermoso, muy lindo. Desde ese momento, yo no podía parar de sonreír, es contagioso! El pidió de inmediato hablar con Becca, y aun cuando él no había hablado con ella en meses, Becca aun seguía siendo muy especial para con él. Me hizo reconocer que los muchachos aun recordaban la conversación que tuvimos con ellos y que ellos valoran mucho las relaciones que entablamos con ellos. Aun cuando Marvin y yo no pudimos tener una conversación profunda, los abrazos y sonrisas pueden ser mucho mejor a veces.
El Viernes de esa misma semana, Stephen llevo parte del grupo en el que habíamos venido para mostrarnos de donde los muchachos habían salido y para poder sentir cual es la realidad de la vida en las calles. Fue increíble ver los lazos de amistad que Steven ha construido con esos jóvenes. Ellos no tenían miedo de acercarse a nosotros, y aun antes de aprender nuestros nombres nos dieron un gran abrazo. ¿Por qué eso no puede pasar en los Estados Unidos? Sinceramente estos muchachos tienen más cargas y dolor que los que nunca podríamos imaginar y aun así, ellos te muestran una gran sonrisa ignorando su posible pasado y lo que tienen frente a sus ojos, y lo único que hacen es saludarte con un “HOLA” y un posible abrazo. Después conocimos a Belén, ella es una niña de 13 a/nos de edad y es familiar de Axelito; Estiven inmediatamente le reconoció y hablo con ella por un momento. Ella recientemente había estado en un centro de corrección de menores (prácticamente ellos te encierran en una celda y te dan comida cuando quieren, y eso es todo, según ellos es para supuestamente ayudarles). Gracias a Dios, Belén pudo escaparse de ese lugar de tormento y algunos de sus amigos le brindaron su ayuda, aun posiblemente sabiendo lo que había pasado, pero se mostraron como amigos verdaderos en Cristo. ¡Qué panorama tan más bello! Ella termino caminando con nosotros, metió su bote de resistol amarillo en dentro de su camisa, y subió al busito para hablar con Megan. A lo largo del camino, lo único que hice fue intentar mostrarle mi amor para ella lo más que pude, pero a la misma vez sin hacerle sentirse como si le tuviera lastima. ¡Mientras caminábamos abrazadas, ella comenzó a hablarme y yo le podía entender todo! Ella hablaba mucho de su sobrino/hermano (una larga historia) Axelito, de quien ella bromeaba. Reíamos mucho, pero hubo un momento en el cual ella me hizo callar y dijo muy fuerte, “Gracias Señor por la comida, amen”. Después se comió la baleada que le había dado Estiven. Esta linda mucha había estado en las calles por mucho tiempo y ello conoce estas palabras. Nuestro Salvador no tiene límites. El está en todos lados. Belén tiene un corazón muy lindo y yo solo oro para que Dios le proteja y que la mantenga alejada de gente que se quiera aprovechar de su espirito afable.
Víctor me impresiona mucho. Su corazón está lleno de amor y es muy simpático para con los demás. Cada mañana cuando yo llegaba a Miqueas el me recibía con un abrazo muy genuino y lleno de amor. No como esos abrazos que damos cuando tenemos que hacerlo, sino uno que tiene un gran significado, “te quiero.” Este era un chico con quien yo solo había tenido una conversación y que Pedro Luis tuvo que traducir, pero aun así me sentía tan cerca de el. Víctor es la razón por la cual yo vine a Miqueas: aun en medio de uno de los países más violentos del mundo, yo puedo encontrar paz en mi ansiedad que me conforta en las vidas tan hermosas de estos chicos. Yo se que supuestamente nosotros debemos estar apoyándoles y animándolos, y por supuesto que yo hago lo mejor que pueda, sin embargo, ellos hacen más para mi sin poderlo explicar. Sinceramente no puedo imaginar alguien más compasivo que este grupo. Con Dios, ellos son los últimos héroes de sus propias historias. Yo se que ellos se estresan mucho por la escuela y aun sabiendo o no si van a ir a la universidad y como se verá su futuro, pero el hecho que ellos hayan cambiado el rumbo de sus vidas y que están viviendo (o en el camino) para Cristo Jesús, es todo lo que necesitan. Honestamente, ellos lo están haciendo mucho mejor que muchos de nosotros aquí en los Estados Unidos y aun ya conociendo lo que tenemos que hacer, nos enseñan cual es la verdadera meta a seguir. A Víctor le encanta jugar y molestar a las enormes ranas que te podrían hacer pipi en cualquier momento, pero el también sabe cuando hacer un alto, te pone las manos sobre ti, y disfruta de tu compañía. Es impresionante como el ha estado en las calles y en un orfanatorio hasta Enero cuando vino a Miqueas., es muy educado y sus notas son excelentes. Por lo menos ahora lo son :). Sus sonrisas son una gran bendición y no me puedo imaginar los grandes planes que Dios tiene para su vida.
Noé es precioso. Admito que no es exactamente como uno quisiera que fuera, pero llegamos allí! El primer par de días me trató de darle abrazos y ser agradable para tratar de hacerlo sonreír, pero nada parecía funcionar; nunca ponía totalmente la atención y que definitivamente no tenía ningún interés en hacerlo. Parte de eso se debe a que ha sido la inhalación de pegamento para la mayor parte de su vida y por lo que todavía se está vacío de todo eso. Pero no se preocupe, yo aprendimos el camino a su bella :) corazón. Estábamos caminando en el centro comercial y me di cuenta de que estaba cansada (o simplemente perezosos dependiendo de cómo se mire), así que le pregunté si quería un paseo el de lengüeta (en movimientos de la mano, por supuesto). La sonrisa en su cara con sus hoyuelos lindo era el mejor. Me había roto la pared y que me quería para mi servicio de taxi! A partir de entonces, éramos grandes amigos. Durante el juego de Honduras que no iba tan bien para ellos, Anna y yo decidimos jugar a las cartas e invitar a Noé para jugar. ¿Quién sabía que este chico era un maestro en barajar y un aprendiz muy rápido de Go Fish! Incluso aprendió a decir la frase en Inglés! Ese chico es un genio y yo soy tan feliz que Dios lo llevó a Miqueas. Incluso en una semana, vi su personalidad se abren enormemente y no creo que podría haber ocurrido en cualquier lugar, pero Miqueas 2.0. Allí, él es capaz de correr y dejar salir toda su energía (que es interminable) y cuando llegan los tiempos difíciles (como que tiene que sentarse a través de un tiempo de adoración en domingo por la noche), que no es tan fácil sólo para volver a las calles. No hace falta decir que yo era su taxi para el resto de la semana pero me encantó porque tenía un niño pequeño hermoso y dulce en mi espalda. Satanás podría haber pensado que él tenía, pero nuestro Salvador puede rescatar a cualquier persona en cualquier momento de su vida, alabarlo! Noé no es realmente uno para sentarse y escuchar a la gente hablar pero para el culto del domingo se sentó en mi regazo y se quedó allí todo el tiempo y le pidió una última foto. Eso hizo que mi semana.
Ruth Marshall